ALLIOLI


El ajoaceite, allioli, alioli, etc… depende de la la zona de España donde nos hallemos, se denomina de una manera u otra, esta salsa está compuesta por ajo y aceite, estos son originariamente los ingredientes, la historia del allioli o alioli se remonta a hace cientos de años, concretamente a la época romana, al siglo X, dice la leyenda que los romanos le robaron o copiaron la receta a los egipcios, ahí es nada ¿eh?, no tenían bastante con querer conquistar el mundo que encima iban por ahí robando recetas, si hubiera existido la SGAE, veríamos si se iban a ir de rositas, sin pagar canon por copiar la receta.


Por lo visto no eran todo peleas en aquella época, tenían su lado gastronómico, seguramente habría algún Arguiñano de turno, que a falta de tele, se subiría en una tarima en alguna plaza romana, y haría demostraciones de cómo hacer hacer alliolius romanus, en mortero de piedra, claro, también dicen que otro grupo de gente desde el sur de España, lo habrían subido más al norte de la península, haciendo escalas en muchos lugares, Islas Baleares incluidas, llegando al sureste de Francia. Por otro lado, se sabe que en la zona Mediterránea, los íberos ya se la untaban entre el pan, menudo bocatas que se harían los tíos, con pan del bueno, no como el de ahora.


El allioli estaba considerado la salsa de pobres y la mahonesa la salsa de ricos, hoy en día creo que es al revés, la mahonñesa es algo más vulgar, nadie se suele untar mahonesa en el pan, el alioli en cambio se suele ofrecer como canapé, aperitivo, para untar con pan, acompañado de tomate triturado también, en dos platitos o dos morteritos, así pues parece que tiene un poquito más de categoría que la mahonesa.


A esta salsa se le puede llamar de muchas formas diferentes, más arriba hemos avanzado algunas, pero vamos a nombrar unas cuantas más. Allioli en catalán, allioli o ajoaceite en la Comunidad Valenciana, alioli en Madrid, ajolio en Aragón, ajoaceite en Murcia y Albacete, ajiaceite o ajaceite en otros lugares también, pero vamos, el más estandarizado es allioli, si lo pides con ese nombre en cualquier bar de España, te entienden perfectamente, lo que está claro es que es una salsa típica de la gastronomía mediterrránea, fuera de nuestras fronteras se dice alïoli en Francia y curiosamente, tras investigar mucho, hemos sabido que en el mundo árabe existe una salsa igual, es decir la misma pero con otro nombre, “tum madkuk”, una salsa de ajo, que ellos utilizan para acompañar las carnes y vegetales, vamos una salsa universal.


Volviendo a la salsa, la originaria se elaboraba con ajos y aceite, aunque a lo largo del tiempo han surgido algunas variaciones: con aceite de girasol, de oliva o agregándole leche por ejemplo. El ajo por lo general, es un ingrediente imprescindible, además está muy vinculado siempre a propiedades terapéuticas tradicionales, este alimento puede servir tanto para un dolor de muelas como para “disminuir” los efectos del asma.



Esta salsa se utiliza mucho, sobre todo en carnes, quién no ha hecho alguna quedad con amigos en el monte y ha asado carne, en estos asados no puede faltar el allioli, lo suele hacer la madre de alguno, que aún conserva la maestría de elaborarlo en mortero y a la antigua, pero no solo se le añade a la carne, también con pescado, pan solo, arroz a banda o negro queda muy bien.


Bueno, vamos a ir dejando ya a un lado la historia, que está muy bien conocerla, y saber que el allioli no viene del mono, lo nos interesa de ahora en adelante es su continuidad, como se elabora ahora, dónde, cuando, fábricas que se dedican a ello, concursos de pueblos o ciudades, allí es donde vamos a acudir para que esta salsa tan nuestra no se quede en el olvido, palabra de bravero.